Según la declaración judicial, el hombre sintió que una rueda pasaba sobre un obstáculo y retrocedió. La situación se repitió. Y así mató al menor: lo pisó dos veces sin darse cuenta
Un hombre que mandaba mensajes de texto con su teléfono celular mientras estaba al volante de su auto atropelló dos veces a su hijo a la entrada del garaje de su casa y lo mató. El caso ocurrió el 8 de mayo en Columbus, Ohio, Estados Unidos. Pero la noticia trascendió ahora porque el conductor debió declarar ante la Justicia.
Trenton Cook, de 24 años, fue acusado de homicidio no intencional y manejar sin cuidado, delitos menores. La víctima fue su hijo Zakai A. Cook, de sólo 22 meses, quien falleció luego de recibir graves lesiones en la cabeza.
Según la declaración judicial, Cook aguardó a que los hijos de su novia entraran a la casa antes de meter el auto en el garaje. Sintió que una rueda pasaba sobre un obstáculo y retrocedió. La situación se repitió. Y así mató al menor: lo pisó dos veces sin darse cuenta.
Debido a que el lugar estaba despejado y el ropa del niño que el niño portaba lo hacía visible, los investigadores concluyeron que el padre iba distraído.
Los archivos telefónicos que están presentes en la causa revelan que Cook envió un mensaje de texto al mismo tiempo que entraba a su casa. Pese a eso, la policía no halló pruebas de que el hombre haya tenido intención de matar a su hijo. El juez de la causa coincidió con esas evidencia y dejó en libertad al conductor, previo el pago de una fianza de 2.800 dólares.
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Según la declaración judicial, el hombre sintió que una rueda pasaba sobre un obstáculo y retrocedió. La situación se repitió. Y así mató al menor: lo pisó dos veces sin darse cuenta
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Trenton Cook, de 24 años, fue acusado de homicidio no intencional y manejar sin cuidado, delitos menores. La víctima fue su hijo Zakai A. Cook, de sólo 22 meses, quien falleció luego de recibir graves lesiones en la cabeza.
Según la declaración judicial, Cook aguardó a que los hijos de su novia entraran a la casa antes de meter el auto en el garaje. Sintió que una rueda pasaba sobre un obstáculo y retrocedió. La situación se repitió. Y así mató al menor: lo pisó dos veces sin darse cuenta.
Debido a que el lugar estaba despejado y el ropa del niño que el niño portaba lo hacía visible, los investigadores concluyeron que el padre iba distraído.
Los archivos telefónicos que están presentes en la causa revelan que Cook envió un mensaje de texto al mismo tiempo que entraba a su casa. Pese a eso, la policía no halló pruebas de que el hombre haya tenido intención de matar a su hijo. El juez de la causa coincidió con esas evidencia y dejó en libertad al conductor, previo el pago de una fianza de 2.800 dólares.
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