
Las nuevas generaciones han nombrado estas conductas tóxicas; aquí te explicamos cada una.
Es cada vez más habitual que los jóvenes usen términos como ghosting, gaslighting o phubbing, cuyos significados van más allá de su simple traducción.
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De acuerdo con el escritor David Gómez, en su libro Un viaje hacia el amor (propio) (Urano, 2024) se trata de términos utilizados para referirse “vínculos en los que vas a sufrir”, muchos de ellos más comunes de lo que se pensaba, aunque no tenían un nombre como tal.
¿Qué significan todos estos conceptos?
El autor señala que con el auge de las aplicaciones de citas, aunque no necesariamente por culpa de éstas, muchos de los vínculos afectivos son “inmediatos y de consumo rápido, como si las personas fuéramos de usar y tirar”.
Entre los términos que las generaciones más jóvenes han nombrado para referirse a esas conductas tóxicas se encuentran:
Love bombing (bombardeo de amor)
Se trata de una estrategia de “despliegue y conquista”, en donde la parte interesada hace todo lo posible para que la otra persona responda.
Orbiting (orbitante)
Cuando la parte interesada ya captó la atención de la otra persona, ahora tiene una serie de conductas para llamar su atención, pero sólo de vez en cuando.
Gaslighting (luz de gas)
Es un tipo de manipulación o abuso emocional donde la persona que la ejerce siempre buscará parecer la víctima para hacer sentir culpable al otro; es algo tan sutil que la mayoría de las veces es difícil de identificar.
Ghosting
Este término hace referencia a la conducta de cesar toda comunicación y contacto con una persona sin alguna justificación, ignorando cualquier intento de comunicación. Su contraparte es el Zombing, es decir, cuando vuelve a aparecer.
Hoovering
Viene del verbo hoover (aspirar), y consiste en una expareja que reaparece inesperadamente con el fin de reanudar la relación.
Benching
Consiste en tener un plan B, es decir, que tenemos a una persona en espera, con contacto pero sin ofrecerle un compromiso real, o sea, que permanece ilusionada y “en el banquillo”.
Cushioning
Este término se usa para referirse a la práctica de tener varias alternativas en caso que la relación principal no dure o sea importante.
Kittenfishing
Se usa cuando una persona cambia aspectos físicos para resultar más atractivo a los demás.
Birdboxing
Se trata de aquella relación en donde una persona ignora por completo los defectos del otro o sus propios sentimientos, su nombre viene de la película Bird Box.
Breadcrumbing
Término utilizado para referirse a aquellas personas que “dan migajas”, ya que en realidad no sienten interés por el o la otra, pero tampoco quieren perder su atención.
Pocketing
Se usa cuando una persona busca por todos los medios ocultar a la persona con la que tiene una relación.
Negging
La persona hace comentarios despectivos o criticas negativas disfrazadas de halagos.
Red flag
Son todas aquellas señales que podrían dar indicios de que habrá problemas o relaciones conflictivas con una persona.
Stealthing
Una práctica peligrosa que consiste en retirar sin consentimiento el preservativo durante una relación íntima.
Catfishing
Es un tipo de manipulación en donde las personas hacen uso de identidades falsas, para obtener beneficios de la víctima.
Phubbing
Una práctica muy común que consiste en ignorar a las personas cercanas por estar entregado completamente al celular, viene de phone (teléfono) y snubbing (desairar/despreciar).
En su mayoría, las personas que incurren en estas prácticas tienen rasgos de narcisismo, necesidad de validación, falta de empatía, miedo al compromiso, inseguridad, inmadurez emocional, así como necesidad de control y poder.
¿Cómo dañan la salud mental estas prácticas tóxicas?
Un estudio del Newport Institute señala que prácticas como el Ghosting o Breadcrumbing -por mencionar algunas- pueden generar problemas de salud mental además de que puede traer de nuevo a flote heridas de apego no sanadas o que se creía ya curadas.
A corto plazo, estas prácticas traen consigo:
- Confusión sobre lo que pasó, falta de respuestas o claridad
- Pensar repetidamente sobre la “relación”, y si se trata de Ghosting, incluso se cree que hay falta de un “cierre”
- Genera culpa, pues se cree que la víctima en realidad fue quien hizo algo mal
- Crea sentimientos de rechazo y de no ser suficientemente bueno para el otro
Mientras que a largo plazo, ser víctima de estas prácticas tóxicas puede generar:
- Falta de autoestima y de valía como persona
- Desconfianza hacia los demás y complicaciones para tener futuras relaciones
- Tristeza y angustia relacionadas con relaciones
- Soledad, la cual puede abonar a que la persona entre en depresión
- Creencia de que no se es alguien digno de ser amado
- Menor satisfacción con la vida
Por ello es importante reconocer estas conductas tóxicas y entender que, por más vínculo que haya, en algún momento van a impactar negativamente en nuestra salud mental; es importante saber que, en la mayoría de las ocasiones, nosotros no somos el problema.
Para empezar a combatir los efectos de estas prácticas se puede prestar atención a los pequeños detalles (red flags) y poner límites; asimismo, no está de más buscar una red de apoyo así como ayuda profesional.