Una petición con 170,000 firmas se presentará en la Cámara de los Comunes de Canadá.
Recientemente, más de 170,000 ciudadanos canadienses firmaron una petición solicitando que se le retire la ciudadanía canadiense a Elon Musk. Esta petición se fundamenta en las acusaciones de que Musk ha llevado a cabo actividades que van en contra de los intereses nacionales de Canadá, señalando su influencia en las elecciones y su apoyo a un gobierno extranjero que podría poner en riesgo la soberanía del país. La solicitud será presentada oficialmente en la Cámara de los Comunes en la próxima sesión parlamentaria, que comenzará el 24 de marzo.
La controversia comenzó después de que Elon Musk criticara al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, llamándolo “estúpido insoportable”. Estas declaraciones han generado un fuerte rechazo en la población canadiense, que ve en ellas una falta de respeto hacia su liderazgo. Musk, quien es conocido por ser el dueño de Tesla y la red social X, nació en Sudáfrica pero obtuvo la ciudadanía canadiense a través de su madre, originaria de Saskatchewan.
Los firmantes de la petición afirman que Musk ha utilizado su poder y recursos para interferir en los asuntos internos de Canadá, lo que consideran una amenaza a la soberanía nacional. Argumentan que sus intentos de influir en las políticas de otras naciones deben ser abordados por el gobierno canadiense para proteger la autonomía del país.
Te podría interesar: Aranceles seguirán adelante ‘según lo programado’: Trump
La petición se mantendrá abierta hasta junio, y se espera que, en ese período, se convoquen elecciones generales antes de que los parlamentarios regresen a sus sesiones. La situación ha puesto en evidencia la creciente tensión entre Musk y algunos sectores de la sociedad canadiense, quienes sienten que sus acciones no reflejan los intereses del país que lo acogió.
Este llamado a revocar su ciudadanía refleja un sentimiento generalizado de desconfianza hacia la influencia que figuras como Musk pueden ejercer en los asuntos nacionales de países con los que no tienen lazos directos de gobierno. La respuesta del gobierno canadiense a esta solicitud podría tener implicaciones políticas importantes.
