El expresidente Evo Morales, quien ha tenido una fuerte confrontación con el gobierno de Luis Arce en Bolivia, está siendo investigado por la presunta violación de una menor ocurrida hace ocho años.
El expresidente de Bolivia, Evo Morales, anunció este viernes que comenzará una huelga de hambre para exigir un diálogo con el gobierno, después de 19 días de protestas y bloqueos realizados por sus seguidores.
De acuerdo con Morales, se deben abordar “el tema económico” y “el tema político” en dos mesas de diálogo distintas.
Morales detalló que en la primera mesa espera dialogar con la administración de su exministro Luis Arce sobre la crisis provocada por la escasez de dólares, la cual ha limitado las importaciones de combustible que Bolivia vende a precios subsidiados.
Respecto al “tema político”, expresó su esperanza de que se aborde la situación de “dirigentes que han sido injustamente detenidos y encarcelados” en el contexto de las protestas que él y otros seguidores comenzaron hace 19 días, en respuesta a su posible arresto por un caso de estupro que supuestamente ocurrió durante su presidencia en 2015.
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El expresidente Evo Morales, quien mantiene una fuerte confrontación con el gobierno de Luis Arce en Bolivia, ha sido objeto de una investigación desde principios de octubre por la presunta violación de una menor hace ocho años, cuando estaba en el poder, y con quien supuestamente tuvo una hija.
El ministro de Justicia, César Siles, afirmó que “como resultado de esa violación, la madre dio a luz a otra niña, y el padre que aparece en el certificado de nacimiento es el señor Evo Morales Ayma”.
Morales estuvo al frente del gobierno de Bolivia desde 2006 hasta 2019 e impulsó la victoria electoral de su sucesor, Luis Arce, quien fue su ministro de Economía durante más de diez años.