En Celaya, tres personas fueron asesinadas a balazos dentro de un bar, mientras que otras tres fueron asesinadas en el municipio de Tarimoro.
Hombres armados asesinaron a tres personas en un bar de Celaya, y en Tarimoro, otras tres fueron ultimadas en una vivienda. Esto ocurrió a pesar de la llegada de un contingente de 400 militares para fortalecer la seguridad tras la masacre de 12 personas en Salamanca y otros episodios de violencia recientes en la región. Además, el gobierno de Guanajuato envió helicópteros de Seguridad Pública para llevar a cabo patrullajes aéreos en el área.
En un primer incidente, poco después de las 20 horas del viernes pasado, tres personas fueron asesinadas cuando hombres armados entraron al bar Belfast, ubicado en la colonia Las Fuentes de Celaya, y abrieron fuego. Los atacantes lograron escapar con facilidad debido a la falta de efectivos policiales en la zona.
Simultáneamente, a las 20 horas, en la comunidad rural de La Moncada, en Tarimoro, dos hombres armados con rifles de asalto irrumpieron en una casa y dispararon contra los habitantes. Como resultado, tres hombres perdieron la vida.
Los vecinos alertaron a la línea de emergencia 911 sobre la balacera, pero al llegar los policías, soldados y paramédicos, ya no se pudo hacer nada por las víctimas, quienes habían fallecido debido a las heridas causadas por las balas.
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El Ejército solicitó al gobierno de Guanajuato helicópteros para reforzar la vigilancia en el Corredor Industrial y la Región Laja-Bajío, en respuesta al aumento de la violencia en la zona.
En coordinación con la gobernadora Libia García Muñoz Ledo, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) desplegó 400 efectivos para apoyar a la policía estatal y a las fuerzas policiales municipales.
El 3 de octubre, se descubrieron los cuerpos sin vida de 12 personas en diferentes lugares de la ciudad de Salamanca. En cada uno de los lugares donde se encontraron los cadáveres, se dejaron narcomensajes.