Vaya que le ha llovido a Puebla, no solo hablando de los aguaceros del reciente Beryl, sino del ambiente político y social que desde 2019 vive el estado.
Mire que presenciar los lamentables decesos de titulares del Ejecutivo, no es cosa menor; situación que conllevó retos de gobernabilidad; pero los poblanos son resilientes. “Pedacito de patria que sabe sufrir y cantar”, decía Agustín Lara, frase que debió haberla escrito en Puebla, por sus orígenes en Tlatlauquitepec que se aseguran del Flaco de Oro.
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Los 2 años llevaderos del gobierno interino, permitieron mantener un clima propicio para que los poblanos valoraran el rumbo de su futuro, y la contundencia de tal decisión se vio reflejada en los pasados resultados electorales.
Alejandro Armenta Mier, el gobernador electo para el periodo 2024-2030 recibirá un estado plenamente decidido por el proyecto político que comunicó a la sociedad, pero con importantes desafíos en varios frentes.
¿Experiencia? Bastante. Más de 30 años de carrera política han cultivado en su persona la sensibilidad que debe tener un servidor público de altura, no refiero al nivel jerárquico, sino al valor de su vocación. Su acérrimo recorrido por ciudades, pueblos y comunidades, le han arraigado las exigencias ciudadanas más añoradas. Armenta conoce Puebla y Puebla lo conoce.
Para usted que me acompaña en estas líneas y si coincide en ser poblano, le digo: viene lo bueno. Hay condiciones para ello. Una sociedad que cree en un proyecto y a la cabeza un experimentado político. Sume a lo anterior una cercana interacción institucional con Claudia Sheinbaum, la próxima presidenta de México. En la planeación de los proyectos estratégicos del gobierno federal entrante, Puebla está presente. Los 100 Pasos para la Transformación contemplan la modernización carretera, la conformación del corredor industrial textil, automotriz y eléctrico-electrónico, la influencia del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec y la anunciada construcción del tren México – Puebla – Veracruz.
Además, existe una sólida planeación estatal para impulsar un desarrollo equilibrado y reposicionar a Puebla en el escenario nacional. Los ejes del plan de acción se estructuran en temas de primera relevancia social: seguridad pública, gobernabilidad, desarrollo económico, rural y turístico, electromovilidad, medio ambiente y administración transparente y moderna.
Pongamos atención en el fomento a la instalación de nuevas universidades, a la movilidad eléctrica, a la tecnificación del campo, al desarrollo de infraestructura social y turismo, áreas donde las apuestas están dadas.
El potencial es enorme. Los poblanos poseen una riqueza natural y cultural privilegiada, una posición geográfica estratégica y mano de obra calificada. Voluntad política y participación social hoy se conjugan para pensar en una Puebla más próspera y mejorar su aletargada décima posición en PIB estatal respecto a las demás entidades.
Hago énfasis en el impulso turístico pues esta actividad tiene profundos impactos en el bienestar local; es innegable el perfil turístico que han desarrollado la ciudad capital y sus Pueblos Mágicos. Armenta ha señalado que el reto es orientarlos hacia la sostenibilidad y beneficio comunitario. Coincido.
Los proyectos enunciados por el gobernador electo como la integración turística de la Sierra Norte, el desarrollo de ecoparques turísticos, la Agencia de Turismo Comunitario y el mejoramiento de la infraestructura urbana en diversas localidades, son factores que mejorarán la competitividad del sector.
Más no es siempre mejor y mejor no es siempre más; por ello, existe una oportunidad de oro para que se privilegie tal vez un turismo no masivo, pero sí más consciente del patrimonio, donde el goce de esta actividad genere una relación cognitiva que contribuya al desarrollo integral de las personas y de las comunidades y que una óptima gestión de determinantes como calidad, integración regional, equitativa derrama económica, conservación del patrimonio y salvaguarda de los derechos humanos se traduzca en bienestar general.
Hacer las cosas diferentes para tener resultados distintos que impulsen a Puebla a un nuevo estadio, eso es Pensar en Grande; frase reveladora que ha tomado la administración en transición de Alejandro Armenta. Es momento de pensar que Puebla puede ser más grande que su propio territorio a través del turismo, posicionándose en la mente y corazón de todos los mexicanos.
Hay con qué… 12 Pueblos Mágicos, Cuetzalan catalogada como entre las mejores villas turísticas del mundo; el centro histórico de la capital, la Reserva de la Biósfera de Tehuacán – Cuicatlán y los monasterios del siglo XVI catalogados como Patrimonio Mundial de la Humanidad; la pirámide más grande de México está en Cholula, talleres artesanales de esferas de cristal y aguas termales en Chignahuapan, huertos de manzanas que producen licores únicos en Zacatlán; el mejor café de altura lo encontrará en Xicotepec; una sierra mágica de pueblos tradicionales con historias de gestas heroicas en Tetela, Zacapoaxtla y Xochiapulco con motivo de la batalla del 5 de mayo que hasta Obama la celebra en la Casa Blanca; en Zapotitlán la salina más antigua del continente; en la mixteca los mejores mezcales artesanales que podrá encontrar en México.
Créame cuando le digo que los poblanos tienen mucho que aportar. La bandera que enarbola su orgullo e identidad tiene texturas de colorida talavera.
Y de comida, mejor ni hablamos. Lo que si puedo adelantarle es que, por estas fechas, a los poblanos los encontrará de manteles largos con la tradicional temporada del chile en nogada.
Las evidencias históricas datan que desde el siglo XVIII se preparaba como postre; sin embargo, el 28 de agosto de 1821, día de San Agustín y poco antes de la consumación de la Independencia, Agustín de Iturbide al mando del Ejército Trigarante entró a la ciudad de Puebla recibido con triunfos y alfombras florales. Después de una misa, fue invitado a un gran banquete en el palacio episcopal, en su honor fueron preparados 14 platillos por diversos conventos, destacando la decoración tricolor de los chiles rellenos bañados en salsa de nuez que las monjas de Santa Mónica le prepararon al Libertador. Allí nació el chile en nogada tal como lo conocemos; el platillo más barroco, elegante y emblemático de la cocina mexicana, tanto así que antes de comerlo, hay que tomarse necesariamente una selfie con él.
De tal manera que le recomiendo visitar en estas fechas uno de los tantos restaurantes locales que ofertan este manjar o por lo menos conseguirse un amigo poblano a quien sonsacarle un buen chile hogareño. Y si, … van capeados.
Corolario.
Resulta una emocionante prueba escribir dirigiéndome a tan distinguido público que las lee. En este primer ejercicio de comunicación de quien suscribe, resalto que se requiere responsabilidad, valor y sensatez. Digno de reconocer a quienes por profesión o vocación plasman su pensamiento en la caligrafía; por ello, mi gratitud a mis queridos amigos Don Carlos Mora y al Mtro. Hugo Alfredo Hinojosa, quienes me han incentivado a imaginarnos a través del papel o la pantalla de tan importante medio. Eternamente agradecido por sus enseñanzas.
Nos vemos a la próxima.
Mario Alberto González
X: @SoyMario_Mx
Correo: soymario.mx@gmail.com