En las aceras puede observarse la presencia de comerciantes informales que venden en carritos de supermercado o con lonas colocadas en los pisos
Los vendedores informales que se han instalado en corredor Reforma-Juárez ofrecen todo tipo de productos, desde artesanías y dulces hasta electrónicos de fabricación china.
En un recorrido se observó la presencia de comerciantes informales concentrados en Paseo de la Reforma y Lieja, donde se ubica la explanada de la Estela de Luz; así como en las glorietas de La Diana Cazadora, el Ángel de la Independencia, el Ahuehuete y el cruce con Insurgentes.
La Secretaría de Gobierno ha implementado más de dos mil 800 acciones para inhibir el ambulantaje en Paseo de la Reforma, en lo que va del año.
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Sin embargo, ya sea en puestos tendidos en el piso, en triciclos adaptados o en carritos de supermercado, los ambulantes ofertan comida, botanas y artesanías, entre otras cosas, a trabajadores de la zona y turistas nacionales o extranjeros.
Tarin Daniela Muñoz, directora general de Programas de Alcaldías y Ordenamiento de la Vía Pública (PAOVP), dependiente de la Secretaría de Gobierno, dijo que los llamados toreros optan por esa forma de venta para que les sea más fácil retirarse con sus productos antes de que llegue la autoridad.
En una entrevista con Excélsior, dijo que “el comercio en Reforma, en efecto, no está autorizado. Lo que sí tenemos es presencia de toreo, que son estos comerciantes que tienen su lona, con ciertos productos, y son los que se echan a correr cuando ven a la autoridad”.
Ante ello, enfatizó, se mantiene de forma permanente un “convoy” de vigilancia en dicha vialidad.
“Tenemos un convoy constante (con funcionarios de la dependencia) que realizan recorridos de las 9 de la mañana a las 6 de la tarde. Y un convoy nocturno, de 6 de la tarde a 9 de la noche”, expresó.
Esta semana, entre la Glorieta de Amajac y Bucareli, dirección poniente-oriente, se encuentran varios puestos de comerciantes indígenas, principalmente de Oaxaca, quienes afirmaron que tienen permiso de las autoridades locales.
Al respecto, Muñoz sostuvo que se trata de “comercio tolerado”.
Es decir, de artesanos que ocupaban el Centro Artesanal en Reforma 100, en cuyo predio se llevan a cabo obras de reestructura, por lo que la subsecretaría a su cargo habilitó un programa “de reubicación temporal y los vamos rotando de lugar en lugar, cada 15 días”.
Las calles donde son reubicados con carpas son Bucareli, Gante, Revolución o en calles del primer cuadro de la ciudad.
“No lo estamos legalizando, pero les damos opciones para que puedan vender sus productos. Estos espacios están tolerados, por una temporalidad de 15 días y los vamos rotando”, reiteró.
OFRECEN OPCIONES
Cerca de las estaciones de la Línea 7 del Metrobús, que corre por Paseo de la Reforma, están vendedores y artesanos indígenas que, aseguraron, son originarios del Estado de México, Hidalgo y Guanajuato.
Uno de ellos, quien pidió el anonimato, expresó que venden en la zona porque “no hay de otra, hay que buscar el sustento”.
En ese sentido, Muñoz explicó que las autoridades se han dado a la tarea de dar opciones para que los vendedores tengan un espacio para comercializar sus productos, destinando sitios para su reubicación o, en la mayoría de los casos, integrarlos a programas sociales.
Desde el Seguro del Desempleo, Empleo Verde, créditos de Fondeso; alternativas que les creen oportunidades que no sean necesariamente acudir a la venta informal”, comentó.
AFECTAN IMAGEN, AFIRMAN EMPLEADOS
Para comerciantes legalmente establecidos y empleados del corredor Reforma-Juárez, los toreros afectan la imagen de Paseo de la Reforma, considerada una de las vialidades más importantes en el ámbito económico, cultural e histórico de la Ciudad de México.
“Sí lo veo como un problema. Están sobre la acera, entre el paso de visitantes, de turistas, de personas que acuden a restaurantes de por aquí y la verdad, sí afectan”, externó el gerente del establecimiento ubicado entre la calle Florencia y Paseo de la Reforma.