El Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció que Live Nation ha ejercido un control inapropiado sobre la industria de eventos en directo.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha interpuesto una demanda sin precedentes contra Live Nation, la empresa multinacional dueña de Ticketmaster, por presuntas infracciones de las leyes antimonopolio del país.
Esta acción legal se fundamenta en la acusación de que Live Nation ha ejercido un dominio injusto sobre la industria de eventos en vivo, causando perjuicios a consumidores, artistas, pequeños promotores y propietarios de locales.
De acuerdo con las declaraciones del fiscal general Merrick Garland, Live Nation ha empleado prácticas ilegales y anticompetitivas para conservar su dominio en el mercado, lo que ha generado mayores costos para los aficionados, menos oportunidades para los artistas y una exclusión significativa de los promotores más pequeños.
La demanda afirma que Live Nation controla cerca del 60% de las promociones de conciertos y, a través de Ticketmaster, aproximadamente el 80% o más de las ventas de entradas en los principales recintos de conciertos.
La demanda ha sido presentada en el Distrito Sur de Nueva York y cuenta con el respaldo de los fiscales generales de 30 estados, lo cual es poco común y destaca la seriedad de las acusaciones.
Los documentos presentados en el caso explican que el monopolio de Live Nation y Ticketmaster no solo ha incrementado los costos para los consumidores, sino que también ha restringido considerablemente la competencia en la industria.
Te podría interesar: Hombre es tragado por trituradora
En respuesta, Live Nation ha emitido un comunicado defendiendo su posición. La compañía argumenta que la demanda no resolverá los problemas relacionados con los precios de las entradas, las tarifas de servicio y el acceso a espectáculos de alta demanda.
Live Nation sostiene que la mayoría de las tarifas de servicio se destinan a los locales y que la competencia ha reducido constantemente la participación de mercado y los márgenes de ganancia de Ticketmaster.
La empresa también menciona que catalogar a Ticketmaster como un monopolio podría ser una victoria de relaciones públicas para el Departamento de Justicia, pero argumenta que en los tribunales, esta afirmación no se sostendría debido a la compleja dinámica económica del entretenimiento en vivo.
Live Nation y Ticketmaster han enfrentado críticas durante años debido a los altos precios de los boletos y las dificultades en la compra de entradas. Un incidente notable ocurrió en 2002 con la venta de entradas para “The Eras Tour” de Taylor Swift, lo que resultó en enfrentamientos entre los fanáticos, la propia Swift y la multinacional. Esto evidenció las frustraciones del público con las prácticas de la empresa.
La demanda busca disolver Live Nation, lo que podría tener un impacto significativo en la estructura de la industria de eventos en vivo en Estados Unidos. Si la demanda prospera, podría abrir el mercado a una mayor competencia, potencialmente reduciendo los costos para los consumidores y generando más oportunidades para artistas y promotores independientes.