Durante una jornada más de la fase regular de la Liga Central de Deportes, se registró un inusual incidente de violencia en la cancha del club 25 de Septiembre de Guarambaré.
Al concluir el partido, un jugador del equipo visitante intentó agredir al árbitro del encuentro y fue impactado por un balón de goma como respuesta.
En los minutos finales del partido, la intensidad se incrementó notablemente, con entradas duras y agresiones que quedaban sin sanción, recordando a los partidos de campeonatos de la Unión del Fútbol del Interior. En medio de este ambiente y ante la hostilidad hacia el equipo visitante por su derrota, el árbitro optó por dar por terminado el partido en el minuto 92, lo que generó enojo entre los jugadores del 29 de Septiembre, quienes querían continuar jugando.
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Samuel Sanabria, un jugador emblemático del equipo azulgrana, fue el primero en aproximarse al árbitro y lo sujetó buscando explicaciones. Sin embargo, al notar que la situación se estaba volviendo caótica, optó por retirarse con una carrera propia de los mejores velocistas.
El futbolista en cuestión continuó persiguiendo al árbitro, pero en su camino se encontró con miembros del Grupo GEO, quienes intervinieron para proteger al árbitro y, de paso, dispararon balines de goma hacia Sanabria. Este último terminó en el suelo y recibió asistencia médica.