Xóchitl Gálvez pierde adeptos
La candidata presidencial opositora, Xóchitl Gálvez, tuvo un pésimo inicio de año, ya que las diversas mediciones, la ubican entre un 30 y 22 por ciento por debajo de la candidata oficial, Claudia Sheinbaum, rumbo a la elección del 2 de junio próximo.
Las encuestas publicadas por los diarios El Heraldo de México y El Financiero, de plano desencantaron a los intelectuales, periodistas e influencers que apoyan las aspiraciones de la candidata presidencial de PAN, PRI y PRD.
Incluso, personajes como la escritora Guadalupe Loaeza, utilizaron sus espacios en los medios de comunicación para expresar su enojo y decepción por lo gris de su campaña.
A la lista también se suman periodistas que en todo momento abrieron sus espacios para apoyarla, como Ciro Gómez Leyva, quien abiertamente dijo que no hay mucho que hacer y con los números publicados, la morenista Claudia Sheinbaum tiene la victoria asegurada y lo que veremos en los próximos días y meses, será que no cometa errores para aumentar aún más su ventaja o conservarla.
En su análisis en Radio Fórmula, Ciro reveló que, al fracaso de la campaña de Xóchitl Gálvez, también hay que sumar que los partidos que la postulan están en riesgo de perder espacios en las cámaras de Diputados y Senadores, y con ello, Morena y sus aliados tendrían mayoría absoluta en la próxima elección.
Las críticas contra la candidata opositora están por todos lados e incluso varios influencers de las redes sociales, por primera vez, han mostrado su descontento públicamente, por los desatinos en los que ha caído.
Es que su campaña no levanta, a pesar de que su equipo de prensa se la pasa mandando todo el día información sobre sus actividades proselitistas, lo cual significa, que no existe un discurso sólido y contundente de su proyecto político, que ahora pretenden llenar con comunicados (de bajo nivel periodístico) fotografías y videos.
Te podría interesar: God (Criaturitas)
El fracaso de su estrategia, ya lo hemos escrito en este espacio, fue evitar por todos los medios la confrontación diaria con el presidente Andrés Manuel López Obrador, ya que, aunque existía un desgaste a su imagen, también abría la solidaridad de miles de mexicanos que vieron en ella, a la mujer que podría hacerle frente al movimiento de la Cuarta Transformación.
Lo cierto, entonces, es que al impedir mediante amparos que el inquilino de Palacio Nacional hiciera mención a su imagen y persona, entonces se diluyó esa personalidad de guerrera que le traída miles de dividendos a su favor y ahora camina en el lodo fangoso de una campaña que va directo a la derrota.
A Xóchitl Gálvez le falto leer entre líneas la fuerza política que le daba enfrentarse con López Obrador, que contrario a ella, corrió los riesgos al emprender una lucha encarnizada de declaraciones con el entonces presidente Vicente Fox, cuando ocupaba la Jefatura de Gobierno del entonces Distrito Federal.
Si bien es cierto, que de 2000 a 2005, López Obrador tuvo altas y bajas en esta lucha con Fox, lo interesante de esto, es que su imagen se catapultó hasta convertirse en el candidato natural y más fuerte para ganar la Presidencia de la República en 2006.
Xóchitl Gálvez no quiso sumarse a una guerra de titanes y hoy está inmersa en una candidatura mediocre que la llevará a la derrota y con ella, también sepultará a los partidos políticos que la postularon.
Clara Brugada avanza para ganar la CDMX
En la Ciudad de México las cosas no son distintas, ya que el candidato opositor, Santiago Taboada tampoco prendió entre los electores.
No tiene armas políticas para ganar la Jefatura de Gobierno de la capital del país, lo que representa que el presidente Andrés Manuel López Obrador mantendrá su bastión electoral de la mano de Clara Brugada.
El plan en Palacio Nacional es emprender una candidatura tan sólida en la que la morenista vaya acompañada a todos sus actos públicos con el ahora candidato al Senado de la República, Omar García Harfuch, ya que ambos conectan con el electorado.
Aunque también la idea es que el exsecretario haga trabajo de campo para captar el voto de la clase media y con su imagen recuperar importantes espacios en alcaldías como Benito Juárez y Miguel Hidalgo.
Raúl García Araujo