Shires fue arrestada, pero quedó en libertad tras pagar una fianza de 500 mil dólares. No obstante, debido a la aparición de nueva evidencia de amenazas de muerte contra la madre, la fianza fue revocada.
La historia de la trabajadora social Payton Shire, de 24 años, conmocionó a la comunidad de Ohio cuando fue acusada penalmente de abuso sexual a un niño de 13 años bajo su cuidado. La situación tomó un giro aún más aterrador cuando se descubrió que Shires apareció en la casa del menor con un arma, culpando a la familia de “arruinar su vida” y profiriendo amenazas de muerte hacia la madre del adolescente y amenazando con suicidarse.
Te puede interesar: La primera dama Jill Biden se disfrazó de “Willow el Gato” para celebrar Halloween
Shires había sido acusada previamente de conducta sexual ilegal con un menor el 6 de octubre. Pero la situación volvió a cobrar relevancia cuando Shires apareció en la casa del adolescente portando un arma, según informaron medios locales.
En ese momento la madre del menor estaba fuera de la casa pero alcanzó a ver a la joven en el porche a través de una cámara del timbre.
Alertados por la madre, agentes de policía se movilizaron a la residencia donde encontraron a Shires sentada con un arma apuntando a su cabeza y un dedo en el gatillo, gritando que se iba a suicidar.
Informes publicados posteriormente comentan que la madre del niño relató a los investigadores que Shires la llamó y expresó su deseo de matarla y luego quitarse la vida, alegando que tanto ella como su hijo habían arruinado su vida.
Detenida y acusada
Luego de su detención Shires fue acusada de abusar sexualmente de un menor de edad y ahora acusaciones adicionales de intimidar a una víctima de un delito e intimidar a un testigo de un delito.
La sospechosa había sido empleada previamente por el Programa Nacional de Defensa de la Juventud, grupo especializado en trabajar con familias involucradas en el sistema de cuidado de crianza, según informó el Columbus Dispatch..
La investigación habría inciado el 27 de septiembre, cuando la madre del niño se comunicó con la policía para informar del comportamiento de la trabajadora social tras descubrir mensajes de texto inapropiados entre su hijo y Shires.
La policía confirmó la existencia de fotografías del niño y Payton Shires teniendo “contacto sexual”.
Cuando el menor de edad fue interrogado, este reconoció haber tenido relaciones sexuales con Shires al menos en dos ocasiones en septiembre.
Shires fue detenida, pero salió libre al pagar una fianza de 500 mil dólares. Sin embargo, ante la nueva evidencia de amenaza mortal contra la madre esta fianza fue cancelada y permanecerá encarcelada hasta su próxima comparecencia ante el tribunal programada para el 6 de noviembre.