Desde hace un par de semanas, una campaña de publicidad en contra de la prostitución infantil está generando críticas en los Países Bajos debido a que se expone la inocencia infantil.
Un espeluznante anuncio revela la inquietante y franca realidad a la que se ven obligadas a diario millones de niñas prostituidas. El anuncio de la organización benéfica Free a Girl comienza con imágenes extrañas, pero bastante adorables, de niñas que intentan adivinar qué es un juguete sexual. Una niña dice que cree que podría ser un “rodillo de cocina”, mientras demuestra cómo se usa uno en la mesa.
Otra cree que podría ser un rizador de pelo, y muestra cómo funciona enrollándoselo en el pelo. Otros incluso sugieren que podría ser un “lazo para atrapar vacas” o una “verdura”. La película de Free A Girl, organización internacional dedicada a liberar a niñas de la prostitución forzada, se creó para poner de relieve el mensaje “el sexo no es un juego de niños”. El tráfico de menores y la prostitución infantil son un negocio de miles de millones de dólares en la India y las niñas que acaban en la prostitución suelen proceder de allí.