A través de un comunicado, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) reveló que arqueólogos de la institución encontraron una plataforma de hace 174 años que sería la base de un Monumento a la Independencia y que le dio su nombre al Zócalo.
El equipo de la Dirección de Salvamento Arqueológico (DSA) del INAH comprobó lo que varias fuentes habían citado: El monumento, proyectado por Antonio López de Santa Anna para conmemorar la Independencia en 1843, terminó siendo víctima del México convulso.
El basamento fue encontrado durante los trabajos que realiza el INAH desde el pasado 21 de abril para rehabilitar la Plaza de la Constitución.
Bajar 50 centímetros con respecto a la superficie les permitió a los arqueólogos hallar elementos históricos; fue al acercarse al norte del asta bandera cuando detectaron una planta circular de 8 metros de diámetro por 28 centímetros de alto, y rodeada por un patio circular de 3 metros de ancho.
El espacio estaba delimitado por una banqueta circular que serviría para instalar una balaustrada y es posible que contara con accesos hacia los cuatro puntos cardinales.
El hallazgo a cargo de Alejandro Meraz, Gonzalo Díaz, Rubén Arroyo y Ricardo Castellanos, resulta significativo incluso para el Diccionario de la Lengua Española, entre cuyas acepciones esta que en México se hace referencia a la ‘plaza principal de una ciudad, especialmente la del Distrito Federal’.
Por el momento y tras un registro minucioso (en fotografía, dibujo, escaneo), el equipo de especialistas del INAH protegió debidamente los vestigios históricos del zócalo mediante una cubierta geotextil y tepetate, lo que permitirá continuar con los trabajos de rehabilitación de la Plaza de la Constitución.