En el estudio, actualmente colaboran 75 personas y se espera que su número pueda ascender hasta un total de 150 voluntarios
El Gobierno de la Ciudad de México informó que la Secretaría de Salud local participa en la fase 3 del estudio internacional Mosaico, mediante el cual se espera obtener una vacuna que prevenga el VIH.
De acuerdo con la dependencia, el trabajo lo coordina el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, y se encarga de implementar la investigación la Clínica Especializada Condesa Iztapalapa, “Dr. Jaime Sepúlveda Amor”.
En el estudio, actualmente colaboran 75 personas y se espera que su número pueda ascender hasta un total de 150 voluntarios.
Se prevé que los resultados estarán hasta el año 2024 y, a la fecha, no se tiene previsto que se tenga información sobre logros parciales de la investigación, además de los ya conocidos en las fases 1 y 2, cuyos resultados en primates y humanos son alentadores.
El estudio es conducido internacionalmente por la HIV Vaccine Trial Network–HVTN, y es la primera vez que esta red internacional trabaja en México, junto con otras siete naciones.
Es una investigación a gran escala dirigido a hombres y personas trans que tienen relaciones sexuales con hombres y/o personas trans.
El protocolo en el que participan las personas elegidas tiene una duración de dos años y medio e implica que asistan a revisión un total de 14 veces durante el periodo.
También podría interesarte: México participará en pruebas de posible vacuna contra VIH
Parte fundamental del proceso es el consentimiento informado de los participantes, toda vez que deben aceptar someterse a una prueba de VIH -y otros análisis- que deberá ser negativa como parte de los criterios de inclusión.
Asimismo, se realizan pruebas de detección de otras infecciones de transmisión sexual (ITS) como hepatitis B y C, clamidia, gonorrea y sífilis, que atiende la clínica.
Se trata de un paquete de prevención integral; detección, atención y tratamiento de ITS que incluye dotación de condones y lubricantes.
Quien es elegible recibe de inmediato la primera dosis de la vacuna experimental; la segunda a los tres meses; la tercera a los seis y la cuarta y última al año. En los primeros 12 meses se completa el esquema de vacunación. En el segundo año y medio siguientes ya no se aplica el biológico.
Durante el lapso de tiempo que dura el estudio se brinda consejería para la reducción de prácticas de riesgo por vía sexual y se realizan pruebas para conocer el efecto de la vacuna experimental en el sistema inmunológico, tanto en las células de defensa y anticuerpos.
Durante estos dos años y medio se monitorea la seguridad de los voluntarios a quienes se aplica la vacuna. Hasta ahora, en ninguno de los centros de investigación en el mundo se ha reportado una reacción adversa grave o inesperada.
Cabe destacar que es la primera vez que una vacuna experimental contra el VIH llega a fase 3 en casi 40 años de pandemia. Las primeras dos fases han dado resultados esperanzadores en primates y humanos.
En México, la investigación se lleva a cabo en las instalaciones de la Clínica Especializada Condesa Iztapalapa debido a la infraestructura y dimensiones con que cuenta, así como por la convocatoria comunitaria de población en riesgo de adquirir VIH y que es usuaria de nuestros servicios.
Contenido relacionado:
Ssa llama a personas con VIH a vacunarse contra covid
CAB