Si te gusta la cerveza alemana y quieres conocer Alemania, abril es el momento perfecto
El día de la cerveza alemana
El Tag des Deutschen bieres o el día de la cerveza alemana, se celebra cada año el 23 de abril. Ésto, para conmemorar una ley promulgada con la finalidad de regular la calidad en los procesos de fabricación de esta tradicional y deliciosa bebida.
Baviera es un estado ubicado en el sureste de Alemania, y en él se realizan dos importantes fiestas anuales dedicadas a la cerveza. Oktoberfest es la más conocida mundialmente y se celebra del 12 al 17 de octubre. Se realizó por primera vez en 1810, para festejar el matrimonio de Luís I de Baviera y Teresa de Sajonia – Hildburghausen.
Aunque comenzó a festejarse desde 1994, el día de la cerveza alemana supone mayor tradición, pues su origen se remonta a más de 500 años. Además, su influencia cultural en la producción y consumo cervecero de Alemania trascendió las fronteras del tiempo, y es evidente hasta el día de hoy.
La Ley de la Pureza
Guillermo IV de Baviera, como muchos personajes de la historia fue sin duda un hombre sumamente ocupado, libró una guerra con La Casa Habsburgo de Austria, prohibió las obras y textos de Martín Lutero, sofocó las revueltas campesinas de 1525 en el sur de Alemania y todavía se tomó el tiempo de reglamentar la elaboración de su bebida favorita, la cerveza.
Así, el 23 de abril de 1516 promulgó una ley conocida con el nombre de Reinheitsgebot o bien Mandato de Pureza. Esta ley estipulaba que sólo tres ingredientes podían utilizarse para producir cerveza: agua, malta de cebada y lúpulo. De tal forma que solamente cumpliendo dicho requisito se consideraría “pura” la cerveza elaborada.
Evidentemente el mandato de Pureza no consideró la levadura, introducida mucho tiempo después, cuando Luis Pasteur descubrió los procesos de fermentación. Anteriormente se aprovechaban sedimentos de alguna fermentación previa, agregándolos al compuesto para obtener los resultados deseados, o bien reposaban la mezcla y la levadura “aparecía por sí sola.”
El Mandato de Pureza permaneció vigente hasta 1987 cuando Alemania se vio obligada a flexibilizarlo, propiciando el libre comercio de la Unión Europea de Naciones.
Influencia actual
Cabe destacar que esta ley no fue la primera en ocuparse sobre la elaboración de la cerveza. Sin embargo, es la que más influencia cultural tuvo en Alemania para lograr trascender en el tiempo, y formar parte importante de su identidad.
Si bien, Alemania eliminó de sus leyes el Mandato de Pureza, la mayoría de sus cerveceros mantienen intacta la tradición del Reinheitsgebot. Debido a ello muchas etiquetas muestran las leyendas “Elaborada bajo la ley de Pureza” y “500 años de la ley de la Pureza de Münich.”
Además, mucha publicidad contiene las mismas leyendas o alusiones al Mandato de Pureza. Sin mencionar, que en el Oktoberfest sólo pueden servirse cervezas que cumplan con las características del Reinheitsgebot. Asimismo sólo se promociona y consume cerveza fabricada en la zona Baviera, indicio de un importante arraigo cultural y de un fuerte sentido de pertenencia.