Pequeñas tiendas y grandes supermercados comienzan a ser robados por vivales que aprovechan el alto nivel del agua y la poca vigilancia.
A la difícil situación que ya viven miles de tabasqueños tras el desbordamiento de los ríos Tulija y Puxcatán, comienza a sumarse el vandalismo y saqueos que se registran en algunos locales.
Las severas inundaciones que han dejado las recientes precipitaciones y el desfogue de la presa Peñitas, ha provocado que miles de familias en Villahermosa, Tabasco, lo hayan perdido todo o gran parte de su patrimonio.
Y aunque el gobierno federal se encuentra atento de la situación brindando apoyo a los damnificados mediante la implementación del plan DN-III-E, con la cual miembros del ejército y la Marina desalojan a quienes se encuentran en comunidades aisladas, en algunos sitios han comenzado a darse los saqueos.
Pequeñas tiendas y grandes supermercados comienzan a ser robados por vivales que, aprovechando el alto nivel del agua y la poca vigilancia, abren los negocios y saquean lo que pueden.
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Lo anterior se ha dado con mayor frecuencia en las regiones más aisladas hasta donde la ayuda no ha llegado.
Recientemente en redes sociales se viralizó un video en donde se observan los actos de rapiña cometidos en la colonia Gaviota Sur, donde de manera extraoficial se sabe que se detuvieron al menos a siete personas.
Este lunes, durante la conferencia matutina se informó que las inundaciones en Tabasco han afectado severamente a 13 de los 17 municipios.
El saldo hasta el momento en la entidad es de 148 mil 57 personas afectadas y 35 mil 982 viviendas con penetración de agua.
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NCV