Con medidas sanitarias arribaron mil 500 vehículos al espectáculo de Moderatto en tiempos del Covid-19
Un aliento de libertad ante meses de confinamiento por el Covid-19 logró el primer autoconcierto en el Foro Pegaso con el grupo de rock Moderatto, donde arribaron mil 500 vehículos para disfrutar del espectáculo celebrado el pasado viernes 7 de agosto.
El mensaje de Jay de la Cueva (Bryan Amadeus) en uno de los instantes álgidos, dibujó y sintetizó lo que sería la velada en el campo abierto de Toluca: “para el alma y el corazón la mejor medicina es la música en este momento de incertidumbre”.
Y así lo fue por lo menos durante cerca de dos horas de show donde prevalecieron las medidas sanitarias en tiempos del coronavirus.
Desde la puntal apertura del recinto los tripulantes eran checados minuciosamente con la toma de temperatura, a la par de que trajeran cubrebocas, que de cualquier manera eran regalados en un kit desde el acceso.
Una vez dentro eran estacionados los autos con sana distancia alrededor del escenario de 360 grados, el cual estaba montado al centro del foro.
Cuando el reloj marcaba las 20:00 horas arribó Bryan a escena, donde ya lo esperaban sus compañeros de batallas rockeras: Xavi Moderatto, Roy, Mick Marcy y Elohim Corona.
Las rolas “Autos, moda y rock and roll”, “Me gusta vivir de Noche” y “No podrás”, dieron arranque catártico para los presentes, quienes rápidamente se apropiaron del lugar.
En tanto algunos de los espectadores prefirieron estar encerrados en sus autos, otros gozaban desde sus convertibles o se asomaban en los quemacocos, a su vez unos más miraban la panorámica desde los toldos, además de los que decidieron estar de pie con la respectiva sana distancia.
“¡Malditos pecadores! Es importante para nosotros esta noche, estamos rompiendo récord con el autoconcierto más grande”, gritaba el vocalista de la banda mexicana surgida en 1999.
“Isabel” y “Si mi delito es rockear”, configuraron el set sumándose “Muriendo lento” y “Amor prohibido”.
Destaca que permitieron subir a uno de sus fans para que tocara “Ya lo veía venir” (quien portaba careta y cubrebocas), obteniendo como premio una guitarra eléctrica.
El encore quedó finiquitado por “Quemándome de amor” y “Gracias”, en un destello de fuegos artificiales.
A la cercanía de las 22:00 horas Xavi, Roy, Mick, Elohim y Bryan, huían alegres de satisfacción en confabulada correspondencia con sus fans, quienes los ovacionaron con sus cláxones en el éxtasis de una noche que quedará por siempre en los recuerdos musicales en épocas de la pandemia.
Foto: Israel Valenzuela
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