El pontífice realizó 5 visitas a México, uno de los países donde era mejor recibido por la comunidad católica
El Papa Juan Pablo II fue uno de los pontífices más queridos de la iglesia católica. Hoy se conmemoran sus 100 años de nacimiento y sin duda sigue siendo recordado por muchos de manera muy grata.
Juan Pablo II fue el papa 264 de la Iglesia católica y soberano de la Ciudad del Vaticano desde el 16 de octubre de 1978 hasta su muerte en 2005. Además fue canonizado en 2014 durante el pontificado del actual Papa Francisco.
Uno de los momentos más icónicos de Juan Pablo II se dió en 1983 cuando visitó a Mehmet Ali Agca, quien había intentado asesinarlo. En la cárcel de Rebibbia, conversó con él y le otorgó el perdón.
Por supuesto las visitas que realizó a México, están en los mejores momentos de Juan Pablo II, recordados por los mexicanos. La primer la realizó en 1979 cuando visitó Ciudad de México, Puebla, Oaxaca, Guadalajara y Monterrey. La segunda la realizó el 6 de mayo de 1990, en esa ocasión beatificó al indígena Juan Diego en la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe.
Su tercera visita a nuestro país fue en 1993, la cuarta en 1999 y la quinta 2002 en la Ciudad de México. Fue recibido como jefe de estado por el entonces presidente Vicente Fox. Como último acto en territorio mexicano, canonizó a Juan Diego Cuauhtlatoatzin y a los Mártires Cajonos en la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe.
Fuera de México Juan Pablo II sorprendió al mundo. En 1995 con motivo de un discurso en el 50 aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, recordó a los presentes el “miedo, la violencia, la inmensa pobreza, la muerte; las dramáticas experiencias de dolorosas separaciones en un tiempo en el que no había ni seguridad ni libertad y la conmoción imborrable provocada por un exterminio ilimitado.”
En 1997, Juan Pablo II se reunió con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. En 2000, pidió perdón por los errores que los cristianos cometieron en contra del pueblo israelí, hecho que lo categorizó como un papa “revolucionario y reaccionario”.
Durante los 25 años de su papado, viajó varias veces a su patria comunista, animó a la Iglesia a participar en el diálogo social y fortaleció el movimiento sindical Solidarnosc.
A su manera, el Papa contribuyó a la caída de los sistemas comunistas en Europa, de la Cortina de Hierro, así como del Muro de Berlín. Ni siquiera el atentado de un terrorista turco en mayo de 1981 logró pararlo.
Juan Pablo II falleció el 2 de abril de 2005, cuando el avance de la enfermedad de Parkinson lo debilitó hasta la indefensión, limitando su capacidad de habla. Además ya había sido internado en el Policlínico Agostino Gemelli en varias ocasiones por distintos problemas de salud.
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AFG