El suicidio es considerado un problema de salud pública y hoy en el Día Mundial para la Prevención retomamos las duras cifras que ha recabado el INEGI
Desde el 2003, la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio, en colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha promovido cada 10 de septiembre el Día Mundial para la Prevención del Suicidio.
En México las cifras son alarmantes, en promedio, cada día se suicidan 17.79 personas, de acuerdo con las estadísticas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En 2017 este instituto registró 6 mil 484 muertes de este tipo, la tasa de suicidio fue de 5.2 por cada 100 mil habitantes ocupando el lugar 22 entre las principales causas de muerte.
Los jóvenes de 20 a 24 años son los más vulnerables, los cuales tiene la tasa más alta de suicido con 9.3 por cada 100 mil personas de estas edades. En cuanto a sexo, los hombres son los más proclives a suicidarse y si son jóvenes aumenta a una tasa de 15.1 por cada 100 mil. No obstante, las mujeres de entre 15 y 19 años también presenta la tasa de suicidio más alta con 4.0 suicidios por cada 100 mil mujeres.
El Inegi especifica que de acuerdo a entidades federativas, Chihuahua tiene la tasa más alta con 10.7 suicidios por cada 100 mil habitantes; en segundo y tercer lugar, Aguascalientes y Sonora con 10.1 y 9.1, respectivamente.
Por otro lado, las entidades con la tasa más baja de suicidio son Guerrero (1.9), Veracruz (2.6) y Oaxaca (3.1).
Los métodos más empleados para suicidarse son el ahorcamiento, disparo con arma de fuego y envenenamiento, aunque recientemente muchas personas también se han quitado la vida aventándose a las vías del metro.
“El suicidio es considerado un problema de salud pública y constituye una tragedia tanto para las familias como para la sociedad. Puede ser prevenible, de ahí que los esfuerzos en este tema estén dirigidos a identificar personas en riesgo y a mejorar la salud mental de la población”, señaló el Inegi.
Diversos estudios han determinado que la mayoría de los suicidios que producen impulsivamente en momentos de crisis, que acaban con la capacidad de la persona para afrontar las tensiones. Entre las principales causas se encuentran los problemas económicos, familiares, de pareja, dolores o enfermedad; personas que viven violencia, son objeto de abuso o de bullying o simplemente que viven algún tipo de discriminación ya sea por su preferencia u orientación sexual, religiosa o discapacidad.
Sin embargo, el suicidio puede prevenirse y es ahí donde juega un papel fundamental la familia, los amigos o quienes rodean a la persona, pues son ellos los que pueden detectar oportunamente las señales que pudieran dejar entrever que la persona podría incurrir en una conducta suicida. Es el círculo cercano de la víctima quien puede ofrecerle ayuda y evitar una tragedia.
Contenido relacionado
Cinco famosos de México y el mundo que han cometido suicidio
EAS