Una de las hermanas saltó del auto en movimiento mientras que la otra fue rescatada por los vecinos. El conductor de Uber logró darse a la fuga
Aumenta la cifra de violencia generada por conductores de Uber hacia sus usuarios. Esta vez las víctimas fueron dos hermanas de la ciudad de Querétaro.
Los hechos se registraron el pasado fin de semana, cuando las jóvenes salieron de trabajar y solicitaron el servucio de Uber. Antes de abordar una de ellas verificó los datos del conductor y del automóvil.
“Me aparece que va a venir por nosotras un tal Mauricio y llegó el taxi, chequé la foto, las placas, incluso el conductor me dijo mi nombre”, mencionó una de las afectadas.
Todo parecía transcurrir de manera normal hasta que el conductor les pidió pasar a su casa para cerrarla, sin embargo las mujeres se negaron, lo que ocasionó que el conductor diera un volantazo y se dirigiera a otra dirección.
En ese momento el miedo invadió a las hermanas, quienes sintieron el peligro.
“Le dijimos que nos bajara y no nos hizo caso. Lo primero que pensé fue… “Ya no voy a ver a mi hijo jamás”, añadió.
Una de las jóvenes logró brincar del vehículo y pedir ayuda, sin embargo, su hermana permaneció a bordo del taxi.
Ante la desesperación de que su hermana se encontrara en el vehículo, la joven comenzó a gritar por lo que vecinos intervinieron y lograron rescatar a la joven, sin embargo, el conductor logró escapar.
Aunque la denuncia ya fue presentada, la autoridad admitió que había poco por hacer ya que no presentan lesiones o signos de violación.
Mientras en redes sociales las acusan de querer desprestigiar a la aplicación; esta por su lado señaló que ya bloqueó al chófer.
Con información de Ricardo Sánchez.
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