Hay más de treinta heridos, antes del ataque suicida hubo un tiroteo
Un ataque coordinado este domingo dejó 10 muertos y cerca de 20 personas heridas en un hospital de Dera Ismail Khan, en Pakistán, una mujer kamikaze se hizo estallar en las instalaciones del nosocomio.
Previo a este suceso dos hombres a bordo de motocicletas dispararon contra un puesto de control, hiriendo a dos policías que fueron trasladados al hospital, donde la mujer esperaba.
Los hechos ocurrieron este domingo alrededor de las =7:50 horas (hora local).
El ataque fue reivindicado por el grupo talibán pakistaní, Tehrik-e-Taliban Pakistan (TTP).
Salim Riaz Khan, portavoz y oficial de la Policía explicó el orden de los hechos, dijo que la mujer se inmoló en la entrada del hospital, justo una hora después del primer ataque, cuando había mucha gente reunida en el nosocomio.
También informó que dentro de los heridos hay ocho policías y que la mayoría de los afectados se encuentran en estado crítico.
La explosión dañó el área de urgencias del hospital, por lo que se tuvo que cerrar, los pacientes fueron trasladados al hospital militar.
Inayat Ullah, experta forense, informó que la atacante detonó siete kilogramos de explosivos cargados con clavos y cojinetes de bola.
Y aunque el grupo talibán reconoció la autoría de los hechos, no reconoció que la kamikaze fuera mujer, pero se tienen partes de su cuerpo y cabellos, que serán sometidos a análisis de ADN, para confirmar que pertenecen a una fémina.
“La mañana de hoy, comandos de la unidad especial de TTP-STF atacaron a dos policías en un puesto de control en Dera Ismail Khan. De acuerdo con el plan, un atacante suicida Abu Ubaida estaba esperando en el hospital”, detalló en un comunicado el portavoz del TTP Muhammed Khurasani.
De acuerdo a la versión del TTP “cuando la ambulancia que llevaba los cadáveres con la policía llegó al hospital, (el suicida) cumplió su promesa con Dios y sacrificó su vida detonando una chaqueta suicida”.
La declaración difundida por correo electrónico, precisa además que el ataque fue perpetrado en venganza por la muerte de Hafiz Zia ul Rehman, miembro del TTP, abatido por la Policía el pasado 23 de junio en Dera Ismail Khan.
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