Revelan que Trump está considerando un reajuste en su administración para reemplazar a Kirstjen Nielsen como titular del Departamento de Seguridad Nacional, y a John Kelly, jefe de Gabinete de la Casa Blanca
La secretaria de seguridad nacional Kirstjen Nielsen está a punto de renunciar debido a diferencias con el presidente Donald Trump quien la acusa de no tomar medidas necesarias frente a lo que él considera como una crisis en la frontera con México, dijeron fuentes oficiales.
Trump ha acusado de Nielsen de no tomar medidas necesarias frente a lo que él considera una crisis en la frontera entre México y Estados Unidos, según las fuentes. Contener la inmigración ha sido el tema distintivo de Trump y uno al que constantemente regresa como una forma de arengar a su militancia incondicional.
Sin embargo, cualquiera que se haga cargo de Seguridad Nacional probablemente se enfrente a los mismos problemas que Nielsen. La administración ya ha intentado tomar medidas severas en la frontera, pero dichos esfuerzos se han visto en gran parte frustrados o diluidos por los desafíos legales.
Nielsen tenía la esperanza de cumplir un año en el trabajo e irse en diciembre, pero parece poco probable que aguante hasta entonces, dijeron las fuentes. Las dos personas que tenían conocimiento del tema pidieron no ser identificadas porque no estaban autorizadas para hablar públicamente.
Mientras tanto, el futuro político de John Kelly, ya en duda desde hace algún tiempo, es incierto, dado que en las últimas semanas el presidente ha vuelto a discutir el tema con muchos de sus principales asesores y que ha seguido creciendo la distancia entre ambos.
Distintas fuentes consideran al actual jefe de gabinete del vicepresidente, Nick Ayers, de 36 años, como el candidato principal para reemplazar a Kelly, ya que se le ha visto cerca del mandatario desde la pasada semana, particularmente durante la noche de las elecciones de medio término, mientras observaban los resultados en la Casa Blanca.
Se había esperado que Trump hiciera cambios en su gabinete tras las elecciones legislativas y han surgido rumores sobre el estatus de varios encargados de departamentos. Trump les ha contado a sus aliados que realmente nunca confió en Nielsen, a quien asocia con el presidente George W. Bush, un enemigo de antaño.
Los cuestionamientos al trabajo en el departamento de Nielsen no son nuevos. Hace unos meses, negó un reporte del The New York Times de que había escrito una carta de renuncia pero no la presentó después de que Trump la regañara en una reunión de gabinete. Y Trump es conocido por insinuar que quiere despedir a alguien y luego no hacerlo. Durante meses, se creyó que el ex secretario de Justicia, Jeff Sessions, sería despedido antes de realmente ser orillado a hacerlo.
Imagen: @SecNielsen
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