El ingenio mexicano quedó nuevamente de manifiesto con un niño que aprovechó y vio una oportunidad de negocio con la inundación registrada en el trasbordo de la estación Pantitlán, de la Línea A del Sistema de Transporte Colectivo (STC), para cobrar unos pesos, por evitar que la gente se mojara.
Las barras de plástico color naranja, que se usan para la señalización de cierres al paso peatonal, fueron utilizadas como lanchas para que los usuarios cruzaran los pasillos.
El menor comenzó cobrando 5 pesos, pero al ver que había un tramo con más agua, decidió subir la tarifa a 10 pesos. Presumió que en una hora ya llevaba cerca de 300 pesos.
Los usuarios trepaban en las estructuras y eran empujados por el niño, y otro joven, hasta el otro extremo.
“De a 10 varos, carnal eh”, gritaba el niño, mientras cientos de personas esperaban en la orilla.
La intensa lluvia registrada en la tarde del miércoles provocaron anegaciones en las instalaciones y la suspensión de algunas estaciones del Sistema de Transporte Colectivo en las líneas 5 y B, provocando afectaciones en al menos a 10 mil usuarios, estimó el director del sistema, Jorge Gaviño, sin que presentaran desperfectos considerables