Owen Jenkins, un niño de 12 años, rescató a dos amigas que estaban siendo arrastradas por la corriente subterránea del río Trent, en Inglaterra. Pero al salvar a las niñas de 13 y 14 años, Owen perdió la vida.
Cuando las dos niñas se adentraron en el agua y fueron llevadas por la corriente, Owen no lo pensó y acudió a la llamada de auxilio. Rescató a una de las muchachas, acercándola a la orilla. Volvió a buscar a la otra chica que estaba en peligro y la dejó en un lugar seguro, pero lamentablemente no se pudo poner a salvo. Los salvavidas lo encontraron cuatro horas más tarde.
Sus padres, Nicola y Gary Jenkins, lloran la pérdida de su hijo, pero saben que su pequeño siempre estará en la memoria de todos por su valentía y su acto heroico.
“Estamos absolutamente devastados, pero nos trae algo de consuelo saber que a pesar de que perdió la vida, salvó otras dos vidas”, dice. “Están muy agradecidos porque murió por una buena causa.”
Un servicio conmemorativo se llevó a cabo en memoria de este joven héroe. Cientos de amigos, familiares y vecinos se presentaron para mostrar sus respetos. Todos dejaron mensajes y muestras de cariño y admiración.